DECISIONES SALUDABLES ACERCA DEL SEXO

¿ Estás pensando en tener relaciones sexuales? ¿Alguien te está tratando de convencer de tener sexo? ¿Parece que todos tus amigos tienen relaciones sexuales?
Antes de tomar cualquier decisión o si ya has tenido sexo y no sabes si deberías volver a hacerlo, continúa leyendo para obtener información importante acerca de cómo mantenerte saludable. (Y recuerda: si alguien te ha forzado a tener relaciones sexuales, eso NO ES CORRECTO y no es tu culpa. Cuéntaselo a alguien de confianza lo antes posible.)
¡Está bien decir NO! 
No todo el mundo tiene relaciones sexuales. 

  La mitad de los adolescentes dicen “no” al sexo.

No hay nada de malo en querer esperar. De hecho, es una excelente idea. Si decides esperar, mantente firme en tu decisión. Planea con anticipación cómo vas a decir “no” para que te entiendan claramente. Permanece alejado de situaciones que puedan conducir a tener sexo. Muchos jóvenes tienen relaciones sexuales sin proponérselo cuando toman bebidas alcohólicas o usan drogas. El no consumir alcohol ni drogas te ayudará a tomar decisiones más claras acerca del sexo. Si decides tener relaciones sexuales, es importante que te Informes bien sobre el control natal, las enfermedades y las emociones asociadas con el sexo.
¿Por qué esperar?
• El sexo puede conducir a un embarazo. ¿Estas preparada para quedar embarazada o para convertirte en padre o madre

adolescente? Es una responsabilidad enorme. ¿Tendrá tu bebé comida, ropa y un lugar seguro para vivir? 

• El sexo conlleva riesgos de salud. Podrías infectarte con una de
las enfermedades de transmisión sexual (STD, por sus siglas en inglés) como el herpes, los tricomonas o el virus de inmunodeficiencia humana -VIH (el virus que causa el síndrome de inmunodeficiencia adquirida [SIDA]). Un tipo de enfermedad llamada papilomavirus humano (VPH) puede causar cáncer.
• Podrías sentirte triste o enfadado si dejas que alguien te presione a tener relaciones sexuales cuando aún no estás listo.
• También podrías sentirte triste o enfadado si decides tener sexo y después tu pareja te deja. Hasta podría contarle a otras personas que ustedes dos tuvieron relaciones sexuales. ¿Sabrías cómo manejar esta situación? 

Si no quieres contagiarte de una enfermedad de transmisión sexual, usa condones.
Si vas a tener coito sexual (penetración), el uso de condones es la mejor forma de evitar que contraigas una enfermedad de transmisión sexual. Recuerda que nada es cien por ciento efectivo para prevenir este tipo de enfermedades, excepto la abstinencia (no tener sexo). Usa un condón de látex cada vez que tengas una relación sexual, sin importar qué otro tipo de control natal adicional tú y tu pareja puedan estar usando. Para protegerte de contraer una enfermedad al tener sexo oral, usa un condón, un protector dental o una envoltura de plástico que no sea para microondas. Tu pediatra podrá explicarte todas estas cosas. Para proteger tu salud, debes hacerte chequeos médicos regulares, exámenes de orina para detectar enfermedades de transmisión sexual y un examen pélvico (si eres mujer).
Los condones son fáciles de usar. Son más efectivos cuando se usan del modo correcto. Esto es lo que necesitas saber sobre ellos:
Usa condones de látex o de poliuretano únicamente. Puedes elegir entre los condones masculinos y los condones femeninos. Nunca uses estos dos tipos de condones al mismo tiempo, ya que podrían romperse. Al comprar condones masculinos, compra los que tienen un receptáculo (pezón) en la punta para recoger el semen.
Sigue las instrucciones del empaque para garantizar que los estás usando de la forma correcta. Además, revisa la fecha de vencimiento que aparece en el empaque. No compres ni uses

condones que han caducado.

• Puedes tener condones contigo todo el tiempo, pero no los guardes donde puedan calentarse (como en la guantera del auto). El calor puede dañar el condón. Puedes llevarlos en una cartera o billetera, pero no por mucho tiempo, ya que esto acorta su vida útil. 

Si no quieres quedar

embarazada...

Necesitas ¡un método confiable de control natal!
• Si se usan correctamente, los condones tienen un 90% de probabilidades de prevenir el embarazo.
• La “pildora” (pilI) es el tipo de control natal más popular para las mujeres. Hay muchas marcas de píldoras de control natal. Para que la píldora sea efectiva, una mujer debe tomarla todos los días. Al usarse correctamente, la píldora ofrece un 99% de efectividad en la prevención del embarazo. 

• El parche (patch) de control natal es similar a la píldora y se parece a una tira de cinta adhesiva. El parche se coloca en la piel y se cambia cada tres semanas. Los efectos secundarios son similares a los de la píldora.
• Depo-Provera es una inyección que se aplica cada tres meses. Es una opción popular para las mujeres a quienes les cuesta trabajo acordarse de tomar la píldora.
La píldora, el parche y la inyección de Depo-Provera pueden tener efectos secundarios leves, como sangrado irregular, náuseas, sensibilidad en los senos o aumento de peso. Tu pediatra te puede dar más detalles. 

Otros tipos de control natal
Los siguientes métodos NO se recomiendan para la gente joven:

• Norplant. Ya no está aprobado su uso.
• Diafragmas y espermicidas. Éstos requieren de cierta planificación. El porcentaje de embarazos entre adolescentes que usan estos métodos es muy alto.
• El “método del ritmo”. Esto es cuando evitas tener sexo durante ciertos días de tu ciclo menstrual. Este método no es muy efectivo en la prevención del embarazo.

• El dispositivo intrauterino (IUD, por sus siglas en inglés), se usa cuando ya has tenido un bebé y tienes un bajo riesgo de contraer una enfermedad de transmisión sexual.
La opción de estar sexualmente activo es tu elección. El decidir no tener relaciones sexuales es la única forma de evitar todas las enfermedades de transmisión sexual y de quedar embarazada. 

¡Es tu decisión!
Habla con tu pediatra acerca de los métodos de control natal: qué tan seguros y efectivos son, cuáles son los efectos secundarios y cuánto cuestan.